Bodegas Amaren

Bodegas Amaren

Bodegas Amaren nace en honor a Ángeles, esposa de Luis Cañas y madre de Juan Luis (Bodegas Luis Cañas, Rioja Alavesa).
En 1995, Juan Luis Cañas estaba ideando elaborar un vino diferente, un vino que expresara al máximo la personalidad de la variedad. Un 100% Tempranillo procedente de varias parcelas de viñedos viejos. En ese momento, su madre Ángeles fallece y es cuando decide dedicarle su creación, su nuevo perfume: Amaren Reserva Tempranillo 1995. De ahí surge todo, del amor a una madre, porque Amaren en euskera significa “de la madre”. Ángeles fue un pilar fundamental en la creación y desarrollo de Bodegas Luis Cañas y por ello, su hijo no cesa hasta poder homenajearla con su propia bodega en 2016. Cemento, piedra y madera, esa es la esencia Amaren.
En Bodegas Amaren, el campo es un estilo de vida. Son verdaderos expertos en trabajar la viña, y las parcelas son las piezas del puzle perfecto.
La bodega está ubicada en Samaniego (Rioja Alavesa), y la rodean 65 hectáreas de viñedo de entre 35 años y 110 años de edad. Las viñas son de pequeña superficie y se caracterizan por estar situadas en tierras de origen arcillo calcáreo de escasa fertilidad. Con un microclima único, la viña hace honor a la tradición vitivinícola de la región ofreciendo bajas producciones, racimos y uvas de pequeño tamaño y excelente calidad. Potenciar el campo, un trabajo duro. Su departamento de viticultura, todos ellos verdaderos artesanos del viñedo,  lleva a cabo un exhaustivo y minucioso control sobre cada parcela.
Dadas las características del viñedo todas las labores se realizan a mano y en alguno de los casos, con tracción animal. Se trata de cuidar de la tierra de la forma más natural posible, siguiendo las pautas de una viticultura racional, para preservar la gran diversidad de especies animales y vegetales que pueblan cada parcela.
La vendimia se realiza en el mes de octubre. Las uvas vendimiadas en cajas entran en Bodegas Amaren y pasan directamente a una cámara frigorífica, dónde permanecen toda la noche a 6 grados. El objetivo es producir en las uvas una maceración intracelular pre fermentativa, que ayudará a extraer al máximo sus aromas primarios.

Todas las uvas que entran en Bodegas Amaren pasan por la doble mesa de selección de racimos y granos.
Con AMAREN, Juan Luis Cañas elije volver a los orígenes, a sus raíces, y elaborar los vinos en depósitos de hormigón, como se hacía en tiempos de Ángeles. Los depósitos que hoy en día se utilizan en bodega son de pequeña capacidad (15.000 L), totalmente restaurados con resina epoxi, y sistema de control de temperatura. El hormigón protege los vinos de los choques térmicos, permite una mayor extracción de la fruta, y una estabilización natural más respetuosa con el vino.
Amaren Crianza y Ángeles de Amaren son dos vinos perfectos para iniciarse al lenguaje de esta bodega, que se expresa con elegancia, delicadeza y estilo propio.

Para más información visitar www.bodegasamaren.coma